Las camionetas deportivas se distinguen por ser espaciosas, elegantes, de gran movilidad y poderosas. Las anteriores son solo algunas de sus características y que se pueden enlazar de manera fácil a las camionetas deportivas y a su funcionamiento.
Muchas personas dudaron de la calidad de las mismas hace algunos años, pero el panorama ahora cambió por completo. Por ello se registraron grandes ventas y que se registran en los concesionarios y los grandes salones automotrices en las cuales se llevan muchas de las miradas y los aplausos del público asistente.
Se trata de un renacer sorprendente para uno de los tipos de vehículo que fue sujeto de obituarios cuando los precios de la gasolina se dispararon en 2008 por la crisis económica de las hipotecas. Los fabricantes de automóviles atrajeron a varios clientes produciendo SUVs (por las siglas en inglés de "Sport Utility Vehicle") más eficientes y pequeños y que también son populares entre los nuevos ricos de zonas como Asia y Sudamérica y también en antiguos escépticos por Europa.
Los automovilistas de la India quieren esas camionetas para transitar caminos que tienen terrenos accidentados, en tanto para el público de China es un símbolo de estatus y para aquellos que tienen edad avanzada en Europa y Estados Unidos su preferencia está en su gran facilidad para subir y bajar de los mismos.
En tanto, las familias brasileñas de clase media disfrutan su espacio interior con las camionetas deportivas. Y por estas razones, las SUVs más baratas y pequeñas, como la Renault Duster, están atrayendo a clientes que antes no podían darse el lujo de comprarlos.
El año pasado, las camionetas deportivas superaron a los sedanes de cuatro puertas por primera vez como los vehículos más populares para compradores individuales en los Estados Unidos. Para el futuro se espera que China sea el mayor mercado para las SUVs en el mundo.
"El genio escapó de la botella. Las SUVs ha sido descubiertos por suficientes personas que ya no ha retroceso", dijo Karl Brauer, analista de la firma Kelley Blue Book. Las ventas globales de SUVs subieron hasta un 88,5% entre 2008 y 2013, a 15,7 millones, de acuerdo a información hecha por IHS Automotive.
Esta cantidad es tres veces más rápido que el crecimiento global de automóviles en general. IHS predice que para este año las ventas globales de SUVs totalizarán 20,1 millones, mejor dicho llegará a ser uno de cada cinco vehículos vendidos.
En tanto, los fabricantes están encontrando algunos conversos sorpresivos. Francia —donde los ambientalistas solían recorrer las calles cortando neumáticos de SUVs— está debajo solamente de China en el crecimiento de ventas de esos vehículos, con un alza de 220% desde 2008, según Ford. Detrás de ellos, está Turquía en el tercer lugar.
Otro factor importante es la reducción de las dimensiones de las SUVs y que al mismo tiempo tiene una mayor eficiencia de combustible y que éstas fueron las claves para salvarlas. En 2008, menos de la mitad de las SUVs vendidas en el mundo eran pequeñas y los usuarios tenían pocas opciones. Veinte por ciento eran SUVs largas como la Cadillac Escalade de ocho pasajeros y que definió el sector hace décadas pero que con poco éxito fuera de los Estados Unidos.
Viendo que había una demanda insatisfecha, las compañías automovilísticas comenzaron a producir SUVs pequeñas y cada vez más eficientes y ágiles. Así nacieron subcompactos como el Chevrolet Trax y que es más pequeño que un sedán Corolla de Toyota. Esa táctica resultó.
Las ventas de SUVs pequeñas y subcompactas como la Toyota RAV4, la Buick Encore y la Ford EcoSport han aumentado en más del doble en todo el mundo desde el año 2008. Por eso, los nuevos vehículos de Jeep, Honda, Fiat y otras compañías arribaron después a los concesionarios y todo ello hará mantener el crecimiento de las SUVs. Hoy en día, las pequeñas representan ahora el 58% de las ventas globales y las grandes han bajado a 12%.
La nueva hornada de SUVs es lo suficientemente pequeña como para atraer a compradores en mercados emergentes, pero son lo suficientemente cómodas para clientes que buscan reducir sus vehículos en Europa y Norteamérica. Eso es bueno para los fabricantes de autos, que se ahorran dinero al diseñar un vehículo que satisface a diferentes clientes.
Con dimensiones menores viene una mayor eficiencia en el uso de combustible, otro factor de atracción para los compradores. China está registrando el mayor crecimiento por un margen amplio, con un alza de 480% desde 2008, hasta 3,7 millones de SUVs el año pasado: alrededor de 20% de las ventas totales de vehículos en el país.
Los europeos se demoraron más para aceptar que las SUVs consumían demasiado combustible y eran bastante difíciles de maniobrar en calles estrechas. El subcompacto Nissan Qashqai cambió sus opiniones tras salir a la venta en el 2006, de acuerdo al analista de IHS Carlos Da Silva. El Qashqai fue diseñado en Londres para los compradores europeos que deseaban algo espacioso pero menos agresivo que una SUV grande.
En China, las ventas se dispararon unos pocos años más tarde. En el 2010, primer año en que el popular HR del fabricante chino Great Wall salió al mercado, las ventas de SUVs superaron un millón de vehículos. Este año, IHS espera que las ventas superen los 4,8 millones y estamos seguros de que no solo se superará sino que se doblará.
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